Victoria en Cristo Parte 2

Por Elena G. de White

"Porque Dios es el que en vosotros produce así el querer como el hacer, por su buena voluntad". Filipenses 2:13.

"La gracia de Dios es el fundamento de la esperanza del cristiano, y esa gracia se manifestará en la obediencia.

"Cristo es  el misericordiso y compasivo Redentor. En su poder sustentador, los hombres y las mujeres se vuelven fuertes para resistir al mal. Cuando el pecador que está bajo convicción considera al pecado, éste se vuelve para él sobremanera pecante. . . .Ve que sus faltas deben ser vencidas y que sus apetitos y sus pasiones deben ser sometidos a la voluntad de Dios. . . .Habiéndose arrepentido de su transgresión de la ley de Dios, se esfuerza fervientmente para vencer el pecado. Busca revelar el poder de la gracia de Cristo, y es llevado a una conexión personal con el Salvador. Mantiene a Cristo siempre delante de sí. Orando, creyendo, recibiendo las bendiciones que necesita, se acerca más y más a la norma que Dios tiene para él." God's Amazing Grace, pág. 253.

"El Señor Jesús  vino a la tierra a fin de recrear la imagen de Dios en el hombre. Le dice al pecador arrepentido: 'te daré un nuevo corazón.' 'Si alguno está en Cristo, nueva criatura es: las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas.' El que mora en Cristo, y tiene a Cristo morando en su corazón por la fe, no puede retener los mismos rasgos feos de carácter que se manifestaron en su vida antes de que tuviese una conexión con Cristo. Cristo vino a salvar a los hombres de sus pecados, no en sus pecados. 'Dios estaba en Cristo reconciliando el mundo á sí, no imputándole sus pecados, y puso en nosotros la palabra de la reconciliación'. 'Al que no conoció pecado, por nosotros lo hizo pecado, para que nosotros fuésemos hechos justicia de Dios en él.' 'Así, pues, nosotros, como colaboradores suyos, os exhortamos también a que no recibáis en vano la gracia de Dios.' 'Porque todos los que son guiados por el Espíritu de Dios, éstos son hijos de Dios.' 'Mas vosotros no vivís según la carne, sino según el Espíritu, si es que el Espíritu de Dios mora en vosotros. Y si alguno no tiene el Espíritu de Cristo, no es de él. Pero si Cristo está en vosotros, el cuerpo en verdad está muerto a causa del pecado, mas el espíritu vive a causa de la justicia.'

"Cristo vino al mundo a fin de que llegásemos a ser nuevas criaturas, creadas a la semejanza de su propio carácter; a fin de que tuviéramos pureza como la pureza de Dios, perfección como su perfección. En la obra de la redención la belleza original comienza a ser restaurada. Los atributos del carácter de cristo le son impartidos al alma, y la imagen de lo divino comienza a resplandecer. 'Por tanto, nosotros todos, mirando a cara descubierta como en un espejo la gloria del Señor, somos transformados de gloria en gloria en la misma imagen, como por el Espíritu del Señor.' Se afirma claramente que un cambio toma lugar en el carácter del agente humano." Signs of the Times, 21 de agosto del 1893.

Continuará. . .