Tuesday, June 7, 2022

Fortaleza Mediante la Lucha

 


Ha sido comprado por un precio infinito y no se pertenece a sí mismo. El alma, el cuerpo y el espíritu pertenecen a Jesucristo y usted debe con toda humildad, pero con firmeza y decisión, decir: "Soy del Señor. Le serviré con todo mi corazón, mente, alma y fuerza".

No se desanime con la oposición que enfrente. Puede ser que en el tiempo presente sea más agradable flotar con la corriente porque el descenso desde la justicia y la santidad a la oscuridad y la transgresión es fácil, mientras que el que busca ganar las costas eternas tendrá que luchar contra viento y marea. Una fe y religión que no sea agresiva en espíritu o heroica en acción, sino que esté corrompida por las corrientes mundanas, es la única religión admirada, respetada y estimada digna por el mundo....

El escarnio y la burla proveniente de la clase que desprecia la verdad de Dios es un elogio a la integridad cristiana. Si usted fuera del mundo, podría disfrutar de sus sonrisas, sus halagos y sus aplausos. Si Jesucristo está en usted, la esperanza de gloria, su espiritualidad reprenderá el orgullo y la extravagancia del mundo. . . .

La oposición que encuentre puede resultarle una ventaja en muchos aspectos. Desarrollará una clase de virtudes cristianas que rara vez brotan en el camino de la prosperidad y la luz del sol. La fe, la paciencia, la tolerancia, la mente celestial, la creciente confianza en la Providencia son los frutos que florecen y maduran en medio de nubes de oscuridad, tormenta y tempestad. El árbol del bosque que está solo y expuesto a los vientos feroces y la tormenta y la tempestad no será arrancado de raíz por el vendaval, sino que echará raíces profundas y extenderá sus ramas en todas direcciones, haciéndose más hermoso y fuerte como consecuencia de su resistencia a la tormenta y tempestad. Ese puede ser su caso. Puede que se veas privado de la simpatía y del apoyo humano y que sienta que su única esperanza es levantar las manos en súplica a Dios y colgar su alma indefensa de su Redentor. La ayuda que envía el cielo será justamente lo que necesita. . . . This Day With God, pág. 47.

 

No comments:

Post a Comment