Por Elena G. de White
"Vivimos en un tiempo muy solemne. Responsabilidades importantes descansan sobre nosotros. Se están abriendo nuevos campos para que trabajemos en ellos, y el llamado macedónico está viniendo de todas direcciones: 'Ven. . .y ayúdanos'. Algunos suplican aunque sea por un sólo día de labor entre ellos, si no pueden tener más. Ángeles de Dios están preparando oídos para oír, y corazones para que reciban el mensaje de amonestación. Aún en nuestro medio viven almas que todavía no han oído las razones de nuestra fe." Review and Herald, 22 de octubre del 1914.
"La salvación de la humanidad pecadora y caída es una gran obra de cooperación, en la cual cadea ser, desde el ángel más elevado hasta el santo más humilde tiene su lugar asignado. La compañía innumerable de ángeles está unida con nosotros, en cooperación con Dios y con Jesucristo, en la obra de salvar almas." Review and Herald, 24 de septiembre del 1908.
"Los santos ángeles no pueden trabajar con vosotros en salvar a almas preciosas cuando no manifestáis sabiduría al tratar con las mentes humans, y no podéis adaptaros a diferentes individuos en la manera en que trabjáis. Es algo fácil irritar y destruir; pero se requiere tacto y una sabiduría como la de Cristo para tratar tiernamente y con bondad y amor a aquellos con los cuales nos relacionamos." Reeview and Herald, 2 de enero del 1894.
"Ángeles de Dios están esperando, deseando con un deseo intenso que aquellos que afirman creer la verdad se conviertan en agentes mediante los cuales, cooperando con ellos, puedan comunicarle luz al mundo. Todo el cielo está interesado en la obra que se está haciendo en el mundo, y los ángeles desean que los hombres se conviertan en canales por medio de los cuales la gracia divina pueda fluir hacia aquellos que están sedientos de las aguas de vida." Ibid., 12 de diciembre del 1893.
Continuará. . .
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