Dios se propone que el plan de redención venga a su pueblo
como la lluvia tardía: porque están rápidamente perdiendo su conexión con Dios.
Están confiando en el hombre, y glorificando al hombre, y su fortaleza es en
proporción a la fortaleza de aquello en lo cual dependen.
Se me han mostrado algunas cosas que se cumplirán de aquí a
algún tiempo. Hemos de saber más de lo que sabemos al presente. Hemos de
comprender las cosas profundas de Dios. Hay temas en los cuales debemos
espaciarnos que son dignos de algo más que ser notados de paso. Los ángeles han
deseado examinar las verdades que son reveladas al pueblo que escudriña la
Palabra de Dios y con corazones contritos ora por sabiduría, para obtener
mayores longitudes, profundidades y alturas de ese conocimiento que sólo Dios
puede dar.
Hombres que son llamados grandes han escrito cientos de
comentarios acerca del Evangelio, y a medida que nos acercamos a las escenas
finales de la historia de este mundo, se harán representaciones todavía más
maravillosas. Necesitamos estudiar las Escrituras con corazones humildes y
contritos. Los que dediquen sus facultades al estudio de la Palabra de Dios, y
especialmente las profecías referentes a estos últimos días, serán
recompensados con el descubrimiento de importantes verdades. Manuscript 75,
1899, 4, 5.
Concluido.
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